Mario Palacios Kaim

Caminamos a la orilla del abismo, al borde de superficies repletas de imágenes que simulan lo real apropiándose de la apariencia de las cosas, Caminamos dentro de un cuarto de espejos y pantallas parlantes infinitas que han tomado el mando, gracias a la frágil voluntad del hombre alienado que prefiere obedecer a íconos de su propio ser idealizado, antes que conformarse con su pequeña existencia. 

“Abismo superficial”, es la instalación de reflejos luminosos sobre la superficie del agua a manera de generador primario de imágenes. El contenedor de estos reflejos es una plato negro con agua que regresa cualquier emanación luminosa del entorno. La instalación nos invita a experimentar el mundo de las imágenes como un simulacro de lo real, posible abismo de entrada a la vida ilusoria. 

Material

Agua sobre plato de fibra de vidrio negro.

Medidas

Ø160 x 5 cm

Esta obra se puede hacer a medida

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